jueves, 29 de noviembre de 2007

Tazer: la picana como Institución.

Estuve paveando un poco, videando Norteamérica. Así llegué al suceso, reconstruído mediante varias fuentes de un hecho repugnante, que parece actuado, pero no, esto es Norteamérica, la persecución de mentira, la persecución de verdad, los policiías de mentira, los policiías de verdad, el cine, la tele, Baywatch y la obesidad, la industria, el imperio. Acá, simplemente fué unos cuantos gorilas reduciendo a un flaco por preguntarle -algo que en realidad no importa tanto- por hablarle, en un acto público, al senador Kerry .

De esta caza de brujas (que tiene a los quakers como campeones internacionales, o especialistas históricos) salió ese videito. Fué aproximadamente hace un par de meses. Obviamente, no emergió la información de los medios y sus responsabilidades, sino de una, comoyadije, serie de videitos posteados en el Iutuv. Esto creo que fue en Florida, más allá de la ausencia del asombro.

Pero no termina, acá. No termina en el quid. Es decir, en el hecho por el cual se priva ilegítimamente, ILEGALMENTE, a un pibe por hablarle a un senador; por ejercer su bello derecho de ciudadano -que lamentablemente es poco ejercido. Además hay un quo.

Tazer, tasing. Palabras en inglés. Las busqué en el Webster´s Comprehensive Dictionary. No hay nada. Pasa de Tarzan a Tashkent. Al principio cuando ví el videito no entendía muy bien que pasaba: se ve que lo agarran, que se resiste, en fin, lo tiran al piso, y alredor de él se amontonan la banda de gordos y gordas policías y, acá viene lo "raro": se escuchá un ruido eléctrico.

Al buscar las palabras en el youtube aparecieron una serie de testimonios de lo grave de la enfermedad. Se filman "los gordos" metiéndose picana entre ellos para que "experimenten" lo que es. Para que lo conozcan en carne propia. O sea, 1) está legitimado el uso de la picana por las fuerzas de seguridad, y 2) hay videos de estos pobres seres torturandose entre ellos mismos, para legitimar el uso a sospechosos o, por ejemplo, a un inofensivo estudiante que se expresa en el marco de su hipotética libertad.


sábado, 24 de noviembre de 2007

Sobre Clarice Lispector.


Mientras seguía perdiendo el tiempo, pasé por el Centro Cultural Recoleto. Pocas veces veo cosas llamativas o interesanes en ese antro, no sé por qué. Quizás ningún funcionario ad hoc se sienta compelido a llevar arte en serio, o quizás haya una -cómo decirlo- faltancia de arte en general. Bueno, sea de esto lo que fuere (como dice Magnavacca) lo cierto es que ayer no fue la excepción y casi diría que no estuvo del todo aceptable la visita, si no fuera por algunos fragmentos de CL expuestos sobre las paredes de una sección. También había algunas fotos y auriculares para escucharla; esto es importante. A veces leyendo a Clarice Lispector uno tiene esa sensación que cansa, de mujer agobiada por el cansancio de no sé que, y sus crónicas de mucamas (que, tristemente, nos hacen acordar a Rozitchner solicitando servicio doméstico por su blog) y otros detalles que la fabrican casi como una mujer demasiado argentina (yo también tengo algo de eso, que asco) en el peor sentido de la palabra: esa especie de clase media-alta en ascenso... -aunque precisamente lo del ascenso no sea mi caso.

ALTO, no me lo permito. Clarice es una genia. Me pude dar cuenta de eso en los relatos que ella misma leyó en voz nítida, clara, tan humana, tan animal... recordados, grabados quiero decir, todo ese personaje tan indescriple y que -digamos la verdad- por momentos NO garpa, se termina de delinear cuando uno escucha esa voz hermosa. Clarice, mi sirena, ayer escuché tu canto y me terminé de enamorar:



"Ser feliz es una responsabilidad muy grande. Poca gente tiene valor. Tengo valor pero con un poco de miedo. Una persona feliz es aquella que ha aceptado la muerte"

"Prescindir de la esperanza significa que tengo que pasar a vivir y no sólo prometerme la vida"

"Pero temo lo que es nuevo y temo vivir lo que no entiendo; no sé entregarme a la desorientación. ¿Cómo explicar que mi mayor miedo esté precisamente relacionado con el ser? Y no obstante, es el único camino. ¿Cómo se explica que un mayor miedo sea precisamente el de ir viviendo lo que vaya sucediendo?"

"¿Por qué el ver produce una tal desorganización? Y una desilusión. Pero, desilusión, ¿de qué? Tal vez la desilución sea el miedo a no pertenecer más a un sistema"

viernes, 23 de noviembre de 2007

Sin título.

Mi profesora de la obra de Ricoeur (La "Dra." Silvia Gabriel, que no sólo no es doctora, sino que además es abogada; Abogada: basta, no mienta más)que ella leyó hoy me mandó un mail con la nota un cinco que decepción ella se sintió tan decepcionada no sé esperaba que la iluminé de una manera especial yo joven conflictuado por cuestiones dificiles de comprender entonces me va diciendo en el mail todo lo que está mal todo lo que erré lo que no expliqué corona su crítica con la excusa perfecta parece que simplemente cité textualmente cuando la consigna pedía que transforme los contenidos con mis palabras a veces pienso que nada de lo que hago tiene sentido que ya no sé que probar porque en todo en un corto o mediano plazo me parece una mierda además de que no tengo facilidad para nada y me evado de mis estupidas responsabilidades narcotizandome o simplemente sufriendo quisiera saber como hacer para ser feliz transando aceptando todas estas pelotudeces de esta sociedad de mierda como puedo tener plata sin tener que trabajar como puedo tener una casa sin tener que soportar a mi padre como puedo tener amigos sin querer asesinarlos después de cierto tiempo en fin como seguir viviendo pero hacerlo bien por momentos me parece que estoy esperando la muerte que soy tan idiota que es imposible que me suicide.

Dejé mi mochila en la biblioteca nacional estoy triste pero con miedo una sensación parecida a cuando me agarraban los ataques de pánico cuando desgrababa a Cragnolini y sí nadie lo va a creer que me importa pero yo ahora estoy llorando porque no tengo un puto mango en el bolsillo porque no tengo crédito en el puto celular porque mi padre me detesta igual que yo a él pero no tiene la valentía de echarme de casa a veces pienso que debería irme a una huerta de hippies y comer frutos y trabajar la tierra y dedicarme a hacer el amor o sea cojer con alguna nena que me aguante aunque siendo realistas todos ya sabemos que esa persona nunca existió no existe ni va a existir nunca en la tierra y quizás halla alguien leyendo esto y diga este enfermo mental que se dedica a llenar este blog de mierda de más mierda.

Entonces cómo hacer para triunfar y llegar al podio de los grandes ganadores cómo hacer para no volverse loco cómo hacer para recibir y dar amor cómo hacer para que me chupe un huevo la competencia cómo hacer para extirparme el mal que me aqueja cómo hacer para que esta vida tenga sentido cómo hacer para que por lo menos una gota de vida me mojé la cara porque a pesar de todos los profesionales de la infelicidad que se encargan de hacerme todo más trabajoso voy a seguir existiendo sí un ratito más cada vez un ratito más milimetro a milimetro y no.

Ser ateo.

La búsqueda del fundamento, en ausencia, o bajo la presencia de Dios, pareciera ser una -de las tantas- precipitaciones que la historia de Occidente muestra. Negar a Dios, esforzarse en hacerlo, escribir un libro al respecto, dar conferencias sobre el libro sobre la inexistencia de Dios, en fin armar toda una batería de conceptos y trucos para vivir sin Dios ¿acaso no representa una búsqueda del fundamento último?

Hay una palabrita que me resulta simpática. Fue acuñada por alguien que -nos guste o no- se puso a pensar A OTRO NIVEL. Si, adivinaron. Estamos hablando del GranDerrida. Ahí va:

Logofonofalocarnocentrismo.

Bueno, no me voy a poner a explicarla. Hay quienes lo hacen bastante mejor que yo (como par example: si, de vuelta adivinaron: MBC).

Alguién dirá: todo esto es una crítica a Rozitchner, a su dudosa posición política (que significa una dudosa posición metafísica (que significa una dudosa posición filosófica (que es con lo que se gana el pan de cada día) : hay algo que ya se está deslegitimando) : algo que ya se está deconstruyendo).

Bueno, puede ser.

Tampoco creo que sea tan importante criticarlo. Criticar a Rozitchner, esforzarse en hacerlo fundamentadamente, es una nimiedad. Rescato del "filósofo", su ojo comercial, y -lo más importante, aunque ¿se puede comprobar?- esa ausencia de culpa cristiana para lograr que le paguen por sus conferencias.

martes, 20 de noviembre de 2007

Sobre el proyecto polar de Charly Nijensohn












Cada vez más lejos
sobre el iceberg que se aleja.
Esta es mi parcela.
Ya no hay vuelta atrás.

lunes, 19 de noviembre de 2007

Pepa-ojos-que-espían-detrás-de-una-cola

Estoy cansado, no creo que escriba mucho. Podría hacerlo, porque hace ya unos cuantos días que está cambiando algo, todavía no sé bien qué, dónde, cómo, por qué.

Unas cervezas con amigos cruzando la autónoma ciudad en colectivo, la clave para cruzar el puente. Pepa, perra pequeña, hiperquinética, abandonada, amiga, especie de lobita de juguete sin pedigreecon mucha suerte. JP, el artífice detrás de bambalinas, tirarle una onda a quien la necesita, curarse del viento violento. Me quedé dormido viendo una película, fumando con amigos, mirando las pocas estrellas que salen en estas latitudes tan iluminadas... al rato, me desperté renovado. Hice unos mates, nos sentamos en la cuisine, y así casi, sin darnos cuenta, empezaron a salir. Y Pepa los iba sacando, tranquila, serena... la palabra amor tiene tantas connotaciones que es dificil de usarla sin arrepentirse (¿sí?) con precisión, con verdad. Iban saliendo, y Pepa los iba acomodando, todo ya programado genéticamente: desde el Principio. Pepa, que te conocí desventurada y solitaria habitando la fábrica de amianto. JP, especie de santo del carajo, presencia propicia para que la vida se reproduzca.

¿Qué me importa pensar? ¿qué me importa la religión, el trabajo de esta sociedad étiestati-capitalista? ¿qué me importa el placer, tener plata, seducir mujeres, ser bello, prolijo y ordenado, atrevido, loco, romántico y decadente? ¿qué me importa leer a Nietzsche y Derrida y decir: ven que "nada que ver"? ¿Nada que ver con qué? La vida sigue su curso. El movimiento no se detiene. Iban saliendo, uno, dos, tres, etc. Y Pepa, los lamía, se comía su propia placenta automáticamente. Un automatismo que nos deja atónitos; sorprende ese automatismo, sorprende la vida. Hacía un instante, un rato antes de fumar con B, P y JP, antes de poner la película del artista loco, la abrazé a Pepa, sin saber que la wacha estaba por parir y le acaricié esas tetas hermosas de perrita que siempre fue flaca y ahora, matriz reproductora más allá de todo, madre recibida en la escuela de la vida, las exhibe, cargadas de potencia, para dar. Y se los iba mandando para atrás, se iban acomodando en la distribución geométrica del alimento. Se acomodaba uno, y ya se estaba preparando para sacar el otro... que capacidad Pepa.

martes, 13 de noviembre de 2007

Es la una de la tarde.

Y una vez más, está lloviendo. Uno a veces escribe, pensando milimétricamente que va a decir. Que no va a decir.

Hay cosas que podría contar, nadie me lo creería. En vez de trazar ese rayo de luz, prefiero contar mis miserias, tirarle cáscaras a los chanchos. Adivine quién es el chancho.

Un viaje al delta en lancha colectiva "Jilguero IV" con tapones en los oídos, una cerveza y un libro. Que increíble. El sol traspasaba las torres de vapor de agua estáticas sobre un cielo diáfano, "preclaro". Jaja, amo reírme. No "la risa": reírme.

(Lo de los tapones fue recomendación de JP. Los voy a implementar para mis grandes viajes en 55 a Puán. Aunque quizás ...)

¿Seguiré yendo a Puán?

Largas cursadas, largos viajes en colectivo, el mismo lugar, de tanto deambular por esa sumatoria de pisos encimismados, entre carteles de todos los colores y dimensiones, entre puesteros, camaradas, caras conocidas, y decadencia. Que pavada.

¿Para que me torturo escuchando y escuchando, asintiendo y asintiendo?

Encontré los relatos originales de Conan el Cimmerio I y II; muy bueno, capo Robert Howard. Lástima que cumplió el designio, y se voló la gulliver antes de los treinta.

¿Perdí el entusiasmo?

"En este mundo los hombres luchan y sufren en vano, y solo encuentran placer en el torbellino enlo quecedor de la batalla (...). Que me dejen vivir intensamente mientras viva; quiero saborear el rico jugo de la carne roja y sentir el sabor ácido del vino en mi paladar, gozar del cálido abrazo de una mujer y de la jubilosa locura de la batalla cuando llamean las azules hojas de acero; eso me basta para ser feliz. Que los maestros, los sacerdotes y los filósofos reflexionen acerca de la realidad y la ilusión. Yo sólo sé esto: que si la vida es ilusión, yo no soy más que eso, una ilusión, y ella, por consiguiente, es una realidad para mí. Estoy vivo, me consume la pasión, amo y mato; con eso me doy por contento". Que grande Conan, jajaja. Esto de La reina de la Costa Negra.

Tengo un parcial domiciliario que entregar en dos días. Que angustia. Debo encarar...

sábado, 3 de noviembre de 2007

El viento en la ciudad.

Acaricia caras, desordena las hojas de los árboles olvidadas. Casi muero entre colectivos. Mejor olvidar. Estoy unido a vos y el tiempo no es más que un chiste dificil. Algunos cuerpos merecen tanto, que el olvido de eso que no se recuerda arde tanto como la llama de ese incendio inextinguible.

Siempre, otra vez. De vuelta.

En Puán hay un vampiro. Si ese de pelo medio rojo-verde, sus colmillos lo dicen todo. También hay un espíritu dionísiaco encapsulado en juegos con el tiempo difíciles de entender. Este gran amigo me dijo: "Vós tenés una primera bárbara". Una primera, como capacidad de transmisión de energía directa, más cercana a potencia, al acelere, que a la velocidad final, que a la velocidad crucero última.

Más cerca del origen que del fin, hoy con veinticinco años estaré en un punto tan envidiado por muchos; sobre todo la potencia de, claro que sí, en un punto tan criticado por otros por no ser lo que tampoco quise -sin saber- ser.

Entonces, siempre lo mismo. Fracaso, crisis, extasis. Y luego, de vuelta a empezar. Despertar, del aterrizaje forzoso. Era una pesadilla. Me levanto, veo el reloj digital, está roto y los números en partes desdibujados, parecen criptogramas soviéticos.

Me veo la cara en ese estúpido mismo espejo de siempre. los mismos ojos, la misma boca, la misma narzi. Las mismas orejas. Labios iguales. Pera igual, con un poco más de barba. Meo, me lavo los dientes. Tomo unas vitaminas, hacen bien.